Asa Cristina Laurell
La Jornada 3 de Marzo de 2016
El paradigma dominante de atención médica basado en su mercantilización ha modificado profundamente el trabajo médico. La introducción del aseguramiento, público o privado, como mecanismo de financiamiento y de la competencia entre administradores de fondos y prestadores públicos y privados, ha alterado a fondo la lógica del trabajo médico y el lugar de la práctica clínica en la atención. El poder médico con sus implicaciones problemáticas ha sido subordinado a los intereses del complejo médico-industrial-asegurador, compuesto por empresas médicas, la industria farmacéutica y biotecnológica, de tecnología médica y aseguradoras.